Si las hemorroides no duelen... ¿por qué debería hacerlo su tratamiento?

Las hemorroides son como ese vecino molesto: no siempre hacen ruido, pero cuando se complican… se hacen notar.

Sangrado, picor, sensación de bultos, molestias al sentarse, miedo al baño.

Y, si has llegado hasta aquí, seguramente ya estás harto de que te condicionen la vida.

Aquí no hay atajos ni pomadas milagrosas

No creemos en soluciones genéricas ni en poner parches.

Porque ya llevas tiempo probando los remedios que se cruzan en tu camino.

Y si estás leyendo esto… será porque no han solucionado tu problema.

¿Crees que seguir haciendo lo mismo te dará un resultado diferente?

Para que el tratamiento funcione - y no vuelva el problema -, hay que entender por qué se han formado tus hemorroides en primer lugar……y corregirlo para que no vayan a más.

Porque la enfermedad hemorroidal no es un castigo divino. Ocurre por un motivo. Aquí nos encargamos de buscar ese motivo.

Pero no todo se soluciona con bisturí

A veces, lo más importante es mejorar la forma en la que vas al baño.

Trabajamos en equipo con fisioterapeutas del suelo pélvico para corregir los factores que han favorecido la aparición de hemorroides: el esfuerzo excesivo, la técnica defecatoria, la falta de coordinación muscular.

Porque operar sin tratar la causa es como secar el suelo sin cerrar el grifo.

Te ayudamos a trazar un camino para olvidarte de las hemorroides y evitar cirugías innecesarias

¿Y si te dijera que operarse no tiene por qué ser un infierno?

Una de las principales razones por las que muchas personas retrasan el tratamiento es el miedo al dolor postoperatorio.

Tiene sentido: muchas cirugías clásicas (hechas por cirujanos clásicos) se hacen cuando el problema ya está muy avanzado, y sin tratar la causa que lo originó.

Y operarse cuando es un martirio cada vez que vas al baño, y te cuesta sangre, sudor y lágrimas… no te lleva a buen puerto.

En cambio, una cirugía bien planeada, cuando ya se ha solucionado la causa de las hemorroides, no tienes dolor al defecar y usas la técnica correcta, puede ahorrarte una vida de sufrimiento a posteriori.

Y lo mejor: no te vas a tener que plantear operarte unos años después - como pasa más a menudo de lo que imaginas.

El corazón del programa «Hemorroides sin dolor»

✔️ Una valoración completa, donde analizamos no solo cómo son tus hemorroides, sino cómo es tu forma de defecar, si hay disinergia del suelo pélvico, estreñimiento, o factores que están perpetuando el problema.

✔️ Un plan quirúrgico personalizado, porque no todas las hemorroides son iguales: podemos usar la técnica láser (LHP), la hemorroidopexia o la hemorroidectomía. Incluso combinar varias en una sola intervención para obtener los mejores resultados.

✔️ Preparamos el cuerpo antes de operar, no solo mejorando la técnica defecatoria, sino también relajando la musculatura con toxina botulínica para que el postoperatorio sea más llevadero y la recuperación, más rápida.